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Trump cerró su campaña en el Madison Square Garden

A pocos días de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, Donald Trump cerró su campaña en el Madison Square Garden de Nueva York, donde reunió a miles de seguidores. Mientras su oponente demócrata, Kamala Harris, realizaba una gira por Filadelfia.

En su discurso, Trump arremetió contra la vicepresidenta, acusándola de “destruir” el país y de ser una amenaza para el futuro de Estados Unidos. Su mensaje resonó entre los asistentes en el emblemático recinto neoyorquino.

El evento contó con la presencia de figuras como Melania Trump y Elon Musk, y tuvo una duración de aproximadamente una hora y veinte minutos. Durante su intervención, Trump criticó la inmigración, calificó a Harris de “desastre” y a su partido como “el enemigo interno”.

Afirmó que votar por ella sería “jugar con la vida de millones de estadounidenses” e instó a sus seguidores a derrotar a los demócratas, a quienes describió como “inteligentes y crueles”.

Además, Trump propuso un nuevo beneficio fiscal para quienes cuidan a familiares mayores o dependientes y expresó optimismo por una victoria en Colorado.

Desestimó un informe que proyecta una posible derrota de Estados Unidos en un conflicto con China, afirmando que “patearían” a sus rivales.

El candidato republicano prometió expulsar a la organización criminal venezolana Tren de Aragua, acusándola de ser una “banda de inmigrantes mortífera” y responsabilizando a Harris por su presencia en el país.

Se comprometió a acelerar la expulsión de esta banda y otras como la MS-13, asegurando que restablecería la seguridad en las ciudades estadounidenses y aplicaría la pena de muerte a inmigrantes que asesinen a ciudadanos.

Durante el evento, el comediante Tony Hinchcliffe generó controversia al referirse a Puerto Rico como una “isla de basura” y hacer comentarios despectivos sobre latinos, afroamericanos, palestinos y judíos. Este discurso fue calificado por Harris como una “diatriba racista”.

Por su parte, Kamala Harris cerrará su campaña el martes 29 de octubre con un acto en Washington, cerca de la Casa Blanca. La recta final de esta intensa carrera presidencial estuvo marcada por un ritmo acelerado y un tono confrontativo.

La llegada de una multitud de simpatizantes de Trump provocó cortes de calles y problemas de tráfico varias horas antes del comienzo del mitin para el que se habían reservado unas 20.000 plazas que, según la campaña del republicano, se agotaron en cuestión de horas.

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