Blinken viaja a Oriente Medio en pleno conflicto Hamas-Israel
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, emprendió un viaje a Medio Oriente en medio de preocupaciones por la posible expansión del conflicto entre Israel y Hamas en la región.
Esto ocurre tras el asesinato del número dos del grupo islamista palestino en Líbano y un ataque en Irán que dejó decenas de muertos, mientras el Ejército israelí intensifica sus operaciones en la Franja de Gaza.
En Gaza, nuevos ataques aéreos y de artillería israelíes causaron la muerte de 125 palestinos e hirieron a más de 300 en las últimas 24 horas, según informó el Ministerio de Salud.
En Beirut, cientos de personas asistieron al entierro del número dos de Hamas, Saleh al-Arouri, fallecido en un bombardeo en Beirut atribuido a Israel. La aviación israelí anunció nuevos ataques en el sur del Líbano contra posiciones de Hezbollah, aliado de Hamas, tras la muerte de nueve miembros del grupo islamista libanés en bombardeos anteriores.
El líder de Hezbollah, jeque Hassan Nasrallah, en un discurso motivado por el asesinato de Al-Arouri, afirmó que el grupo peleará «sin límites» si Israel declara la guerra al Líbano y advirtió que la muerte del número dos de Hamas no quedará «sin respuesta y sin castigo».
El viaje de Blinken, el cuarto a Medio Oriente desde el 7 de octubre, se da en un contexto de tensiones crecientes. Este conflicto ha generado gran indignación en el mundo árabe e islámico, exacerbando las hostilidades entre Israel, Hezbollah y Hamas. La violencia se ha extendido a Cisjordania, con más de 300 palestinos muertos desde octubre, y ha aumentado la preocupación por una escalada a gran escala en la región.
Biden y Blinken han abogado por evitar una gran conflagración regional y han instado a Israel a reducir las muertes de civiles en Gaza. A pesar de los llamados a moderar la ofensiva, el Gobierno de Biden ha respaldado a Israel públicamente, diplomáticamente y con armas.
En Irán, cuyos líderes apoyan a Hamas, dos explosiones mataron a 84 personas en un acto en homenaje al general de la Guardia Revolucionaria Qasem Soleimani. Aunque inicialmente se responsabilizó a Estados Unidos e Israel, el grupo Estado Islámico reclamó el atentado.
La ofensiva israelí ha desatado una crisis humanitaria «catastrófica», según la ONU, con aproximadamente una cuarta parte de la población de Gaza enfrentando la hambruna debido al bloqueo israelí que limita el acceso a alimentos, combustible y medicamentos.
