Mega paro, despidos y guardias mínimas en Aerolineas
El paro convocado por la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) paralizará los servicios de la línea de bandera desde las 12 del viernes hasta las 12 del sábado. La medida afectará a más de 300 vuelos y perjudicará a más de 37 mil pasajeros de la línea.
Por el momento, la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), que representa a los trabajadores de Intercargo, no se sumará al paro. Esto garantizaría las operaciones de rampa en los aeropuertos de Aeroparque y Ezeiza para las aerolíneas low cost como Flybondi y Jetsmart, así como para las compañías extranjeras.
El gobierno declaró esencial el transporte aerocomercial
Tras el paro anunciado, el Gobierno de Javier Milei, a través del Ministerio de Capital Humano liderado por Sandra Pettovello, decidió declarar la esencialidad de la actividad aeronáutica, civil, aerocomercial pública y privada en todo el país.
La reglamentación del «servicio esencial» quedará a cargo de la Comisión de Garantías de la Secretaría de Trabajo, un organismo tripartito con representantes de sindicatos, empresas y el ministerio.
Esta comisión determinará las modalidades, que podrían incluir desde una negociación directa hasta el establecimiento de un piso mínimo de servicios a cumplir, que podría ser del 70% de una jornada normal.
El incumplimiento de los acuerdos sobre servicios mínimos conllevará sanciones según la legislación vigente. El Gobierno argumenta que el sector es estratégico para la conectividad, el comercio y el transporte de pasajeros, por lo que es necesario garantizar un nivel mínimo de servicios ante conflictos laborales.
En medio del conflicto, tres pilotos de Aerolíneas Argentinas fueron despedidos por negarse a trasladar dos aviones Embraer 190 que debían ser devueltos al Lessor (empresa de alquiler de aeronaves).
Los pilotos argumentaron que no avalarían el «vaciamiento» de la empresa. Esta decisión fue impulsada por una directiva de APLA, liderada por el sindicalista Pablo Biró, quien se opone al “achique” de la compañía.
Mientras tanto, el sindicato de pilotos, analizaba la posibilidad de sumar nuevas medidas de fuerza.
