Massa anunció nuevas medidas para contener la inflación y el dólar
El Gobierno nacional implementará un paquete de medidas para moderar los fuertes incrementos de precios de las últimas semanas.
Con la información del índice de precios al consumidor de abril (8,4%, récord en más de 20 años).
El programa se lanza en un escenario preelectoral aún indefinido, con la mayoría de los frentes en plena disputa en la recta final hacia el cierre de listas del 24 de junio.
Sergio Massa, buscan calma una inflación que ya aceleró al 108% (abril contra abril) y que, según los primeros datos de mayo, no desacelerará este mes.
La primera medida será un nuevo aumento de la tasa de interés, que se complementará con una mayor intervención del Banco Central (BCRA) para administrar lo que se llama el “crawling” o devaluación paulatina.
Ya no como una medida concreta, la idea es acelerar al máximo las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), con China (por los swaps) y con los países del bloque de los Bric (Brasil, Rusia, India y China), para simplificar el intercambio de monedas. Con eso, se busca inyectar reservas a las alicaídas arcas del BCRA.
Lo que ya es imposible es conseguir cumplir con las metas originales y reconfiguradas con el FMI. “El programa del Fondo dice que para este año había que acumular 12 mil millones de dólares. El acuerdo firmado en marzo decía que había que acumular 7 mil millones; irrisorio”, resumió la semana pasada en UCC, Gustavo Reyes, del Ieral de Fundación Mediterránea, cuando había rumores sobre un nuevo plan antiinflacionario.
Massa tiene previsto un viaje este 29 de mayo a China y desde allá espera traer novedades.
TASA DE INTERÉS POR EL AIRE
La tasa de interés se fijaría en el 97%.
Esto ocurrirá a menos de un mes de que la autoridad monetaria bajo la presidencia de Miguel Pesce elevó la tasa del 81% al 91%, el valor más alto en dos décadas.
En Hacienda preocupa la corrida del “blue” de finales de abril, cuyo impacto ya se vio en la inflación de abril, pero se esperan las esquirlas en mayo.
El relevamiento semanal que hace EcoGo dice que hubo una variación del 2% respecto de la semana anterior.
“Con este dato, y considerando una proyección de variación del 1,8% para las semanas restantes, la inflación de alimentos consumidos en el hogar en mayo alcanzaría el 8,9% mensual”, dice EcoGo respecto de lo que podría pasar con el IPC nacional de mayo.
Las herramientas y las mayores reservas, acumuladas como sean, buscan dotar a la autoridad monetaria de un mayor poder de fuego para intervenir en los mercados financieros por donde se “filtran” los pesos hacia el dólar: por el contado con liquidación (CCL) salen dólares del país por el mercado electrónico de pagos (MEP) se “escapan” lo que compran dólares por fuera del cepo.
CONTRAPESO
La fuerte suba de las tasas va a golpear el nivel de actividad, que ya no crece en la comparación intermensual desde agosto del año pasado.
Para intentar contrarrestar ese efecto no deseado, desde Hacienda adelantaron una serie de medidas.
La Afip lanzará un nuevo plan de pago de hasta 84 cuotas para la deuda corriente de las empresas y las personas con el organismo, mientras que también dispondrá medidas de alivio fiscal (así lo describe Economía) para la moratoria de las cuotas con tasa Badlar.
Se acelerará la aprobación del sistema Sira para la importación de bienes de capital, aunque en este caso hay que tener presente que todo va a depender de la disponibilidad de dólares que tenga el Central.
Se rebajará en nueve puntos la tasa de financiación del programa Ahora 12, que actualmente se encuentra en 56,5%, para llevarla hasta el 47%, muy por debajo de la inflación.
IMPORTACIÓN DE ALIMENTOS
Una de las medidas que se dejaron trascender desde el Palacio de Hacienda (y que se pondrá en práctica una vez oficializado esta semana) es que se le va a permitir al Mercado Central de Buenos Aires ser parte del registro de importadores.
Tendrá una herramienta más para intervenir en caso de alzas de precios desmedidos en productos frescos y secos de primera necesidad nacionales.
El Mercado Central sumará a sus actividades el rol de importador directo de alimentos, en este caso, con aranceles “cero”.
Massa busca evitar el precio de venta al público de productos como frutas, verduras, hortalizas y carnes; y de no perecederos básicos, especialmente los alimentos de primera necesidad como el azúcar, el aceite y la yerba, por ejemplo.