Legislatura rechazó pedidos de jury contra el procurador y su adjunto
La Legislatura de Chubut rechazó los pedidos de juicio político contra el procurador general Jorge Miquelarena y su adjunto, Emilio Porras Hernández, tras un debate que incluyó un acuerdo entre oficialismo y oposición.
En la misma sesión, se aprobó un nuevo marco normativo para el funcionamiento de las Comunas Rurales y se autorizó a la empresa Aluar a utilizar un terreno portuario para su planta desalinizadora.
Los pedidos de jury contra Miquelarena y Porras Hernández habían sido presentados por la Fundación FUSSO y el ministro de Seguridad y Justicia, Héctor Iturrioz. La Comisión de Asuntos Constitucionales y Justicia determinó que las denuncias eran «inadmisibles» por falta de pruebas documentales y no cumplir con la legislación vigente.
La presidenta de la Comisión, María Andrea Aguilera, y el presidente de la bancada oficialista, Daniel Hollmann, señalaron que las acusaciones carecían de fundamento.
En el caso de la denuncia de FUSSO, Hollmann destacó que se basaba en afirmaciones mayormente falsas y que no existían denuncias previas contra el procurador ante el Consejo de la Magistratura.
Se aprobó el nuevo marco normativo para las Comunas Rurales
La Legislatura también aprobó un nuevo marco normativo para las Comunas Rurales, tras un cuarto intermedio solicitado por el bloque oficialista para consensuar modificaciones con la oposición. La ley, presentada por Leonardo Bowman (Despierta Chubut), reemplaza a la Ley XVI N° 93, vigente durante la última década.
Bowman destacó que las recientes elecciones en las comunas mostraron una participación del 74%, superior al promedio de 70% en los grandes centros urbanos.
Aluar podrá potabilizar agua marina en su predio
Además, se autorizó a Aluar a utilizar un terreno portuario para su proyecto de Planta de Osmosis Inversa (POI), que busca abordar la crisis hídrica en la provincia.
Este acuerdo, firmado entre la Administración Portuaria de Puerto Madryn (APPM) y Aluar, permitirá a la empresa desalinizar agua de mar y convertirla en agua potable, garantizando así la continuidad de sus actividades productivas.
La planta utilizará tecnología de osmosis inversa y se espera que no solo satisfaga las necesidades hídricas de Aluar, sino que también sirva como modelo para otras empresas en la región.
La cesión del terreno es un paso crucial para la implementación del proyecto, que requiere infraestructura vinculada al puerto administrado por la provincia.