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Insultos y piñas en Diputados: la estrategia de LLA para levantar la sesión

La sesión de la Cámara de Diputados concluyó en medio de un escándalo que involucró gritos, empujones y golpes en el recinto. Estas escenas permitieron que Martín Menem se retirara y así evitar un emplazamiento a comisiones para debatir la derogación de las facultades delegadas a Javier Milei, y también impidieron la votación para normalizar la comisión de Juicio Político.

Lilia Lemoine y Lisandro Almirón, de La Libertad Avanza, fueron quienes frustraron estas mociones solicitadas por Unión por la Patria. Ambos increparon a miembros de su propio bloque y a aliados que permanecían en sus bancas, facilitando así el cuórum. Almirón abordó a Oscar Zago, ex jefe del bloque oficialista y actual líder del MID, logrando que este se levantara y agrediera a sus ex compañeros.

El diputado libertario Julio Moreno-Ovalle recibió varios golpes de Zago, quien tuvo que ser sujetado por otros diputados para ser retirado del hemiciclo, mientras Almirón lo insultaba a distancia.

Tras quedar vacía la silla de Zago, el tablero marcó 128 diputados presentes, uno menos de los necesarios para sesionar, lo que provocó la retirada de Menem.

Este altercado en el Congreso ocurrió en simultáneo a la represión policial contra una protesta de jubilados en las afueras.

Simultáneamente a la agresión de Zago, Lemoine, junto con Nadia Márquez y Celeste Ponce, intentaron persuadir a sus compañeras Marcela Pagano y Rocío Bonacci de no facilitar el cuórum, pero no tuvieron éxito. Pagano buscaba confirmar su presidencia en la comisión de Juicio Político, posición resistida por Menem y Karina Milei desde hacía casi un año.

Pagano increpó a Lemoine «¿Qué venís a patotearme? ¿Te crees que me vas a amedrentar?». Ante la negativa de Pagano y Bonacci de moverse, Lemoine y Ponce comenzaron a grabarlas con sus teléfonos. Guillermo Snopek, de UP, intentó intervenir dejando su banca. Bonacci les pidió a sus compañeras que apagaran los teléfonos, pero al ser ignorada, les arrojó un vaso de agua. Ponce difundió el video en redes sociales.

Menem había tratado de evitar la votación de los emplazamientos para discutir la derogación de facultades delegadas y la normalización de la comisión de Juicio Político durante toda la sesión. El presidente de la Cámara Baja postergó estos temas hasta el final, argumentando que no estaban en el plan de trabajo.

Victoria Tolosa Paz, de UP, solicitó considerar las mociones de orden para emplazar o normalizar comisiones, planteando que la Comisión de Asuntos Constitucionales debatiera el futuro de las delegaciones dispuestas en la ley Bases el martes y miércoles.

Nicolás Mayoraz, de La Libertad Avanza, argumentó que el pedido era improcedente porque los proyectos eran recientes. En ese momento, Márquez comenzó a pedir a los presentes que abandonaran la sesión para que no hubiera cuórum, pero no lo logró.

Además de UP, permanecieron en sus escaños los sectores que habían promovido la sesión: Democracia Por Siempre y un sector de Encuentro Federal.

Fue entonces cuando Márquez se enfrentó con Bonacci y Pagano, y Almirón buscó a Zago, con quien mantenía una mala relación desde hacía un año, cuando compartían bloque.

Almirón le reclamó a Zago haber facilitado horas antes el emplazamiento para investigar el caso Libra. Zago no había retomado el contacto con el Presidente tras su enfrentamiento con Karina Milei, que resultó en su destitución como jefe de bloque y su reemplazo por Gabriel Bornoroni.

En medio de la confrontación física, Menem solicitó un cuarto intermedio y, al no ser apoyado, se retiró al verificarse que solo había 128 presentes.

Máximo Kirchner intentó detener a Menem, exclamando «Vos no podés ser el Presidente de la Cámara». Un grupo de UP se dirigió al secretario parlamentario, Adrián Pagán, mostrando su descontento. Paula Penacca, Carlos Castagnetto, Mario Manrique, Lorena Pokoik y Eduardo Toniolli se abalanzaron sobre él.

El grupo de UP avanzó hacia el sector de La Libertad Avanza, pero fue detenido por Cristian Ritondo, jefe del PRO, quien tuvo un altercado con Toniolli. Penacca se situó en el estrado para increpar a los libertarios. Kirchner y Germán Martínez intentaron calmar a sus compañeros. El personal de Diputados desactivó los micrófonos para evitar que el peronismo tomara el control de la sesión.

Tras la suspensión de la sesión, el peronismo expresó su frustración por la pérdida de la oportunidad de revocar las facultades de Milei para tomar decisiones sin la aprobación del Congreso. Tolosa Paz denunció que «Al diputado Zago lo sacaron de su banca a trompadas» y advirtió que evaluarían «cuales son las consecuencias de un presidente de la cámara que viola el reglamento y manipula el reglamento a su favor».

Pagano recibió el apoyo de diputadas de Unión por la Patria, como Cecilia Moreau y Penacca, quienes se acercaron tras el incidente con Lemoine.

Pagano denunció en Twitter a Ponce: «Imperdonable es la corrupción que manejas robándole dinero a tus asesores empleados… Son violentas, son agresivas… Impidieron el funcionamiento de un poder del Estado, ¡¡delincuente!!».

Aunque existieron conversaciones informales entre los jefes de bloque para normalizar la comisión de juicio político, Menem se opuso y no reconoció la presidencia de Pagano. Bornoroni sugirió evitar una votación forzada en el recinto y permitir que Menem volviera a convocar la comisión, pero la oposición no aceptó.

La situación generó interrogantes, ya que Milei había mostrado apoyo a Pagano en la apertura de sesiones, pero se resistían a confirmarla en la comisión.

Pagano se mantuvo firme en su cargo, para el cual había sido elegida un año antes. Zago, quien la había apoyado en su momento, también se vio envuelto en el escándalo en el Congreso.

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