Chubut: ¿de la sequía a la esperanza?

Salir de rojo

Chubut terminó 2017 con un déficit equivalente al 25% de sus ingresos y fue de todas las provincias, la de mayor desequilibrio fiscal.

También Neuquén y Santa Cruz aparecen entre los peores lugares del ranking, aunque se estima que durante 2018 habrá una mejora a partir de un aumento en los ingresos, “ya que ninguna de las provincias logró bajar el gasto”. Los datos se desprenden de un informe del economista Federico Muñoz.

En 2017 sólo 6 de las 23 provincias tuvieron superávit: Santiago del Estero, San Juan, San Luis, Catamarca, Formosa, Mendoza y La Pampa.

Chubut apareció en el último lugar, con un déficit equivalente al 25% de sus recursos. Neuquén aparece en ese mapa con el 15% y Santa Cruz, con alrededor del 12%.

Barajar y dar de nuevo

Si bien la provincia aparece en el peor lugar del ranking deficitario, es de las primeras en el orden de aportes al fisco nacional, al comparar lo que recauda en su jurisdicción en materia de impuestos y lo que posteriormente recibe en el reparto de coparticipación federal de impuestos.

La misma consultora del economista Federico Muñoz, dio cuenta en otro informe de que en 2016 esta provincia fue la tercera mayor aportante, mientras que el gobernador Arcioni dijo que en 2017 esta jurisdicción ocupó el cuarto lugar en ese escalafón.

Los números forman parte de la evaluación que por estas horas tuvieron a su cargo el gobernador Mariano Arcioni y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, con vistas al recorte de alrededor de 100.000 millones de pesos que deben absorber las provincias y entre las que un efecto notorio fue el decreto 702, de recorte del coeficiente zonal para asignaciones familiares, medida que se dejó en suspenso por 30 días.

El tope para las negociaciones entre Nación y las provincias es el 15 de septiembre, fecha en que está fijado el ingreso de proyecto de presupuesto 2019 al Congreso de la Nación. En esa ley se estipularán las pautas de recortes para llegar al 1,3% de déficit primario que comprometió el gobierno de Mauricio Macri ante el FMI.

En detalle, durante el primer semestre de este año Chubut tuvo una mejora de ingresos del orden del 46% en materia de coparticipación federal, sumado al incremento de regalías petroleras, que en junio duplicaron los ingresos de febrero.

De este modo, hay estimaciones de analistas privados que dan cuenta de que la situación provincial podría ser superavitaria en el segundo semestre del año, aunque el ahogo planteado por las deudas externas (los bonos en dólares que se descuentan automáticamente de regalías) y el vencimiento de Letras del Tesoro que el Ejecutivo busca refinanciar a 48 meses podrían provocar un recorte drástico en esa expectativa de mejoras.

Prioridades

Sobre los gastos de la provincia, en lo que respecta a los viáticos utilizados en los últimos meses se han achicado los egresos. Mientras en abril se estaba en un promedio cercano a los $ 300 mil, se pasó a $ 53.000 durante julio, reduciendo un total de $247 mil.

En cuanto a los proveedores, para marzo de este año se pagaron $392 millones, en abril $452 millones, para mayo una cifra similar de $491 millones y el pico fue junio, donde se desembolsaron 516 millones de pesos. Luego cayó drásticamente en julio hasta los $217 millones.

Respecto al pago de las asignaciones familiares, el Estado Provincial, por mes invierte entre 30 y 35 millones de pesos. En tanto que para cumplir con los diferentes programas de becas en julio por ejemplo se destinaron $ 1.780.000.

Luego están los contratos. Allí el mes más abultado fue abril, con 11 millones de pesos. Aunque luego las erogaciones por este concepto se establecieron entre los 7 y los 8 millones de pesos.

De marzo a junio se bajaron partidas para la Legislatura que estuvieron en el orden de los 24 a 25 millones de pesos. Esto cambió en julio, cuando se creció hasta los 32 millones, a raíz de la autorización del convenio con el gremio legislativo (APEL) para el aumento del 8% que había sido firmado el año pasado.

En cuanto al Poder Judicial, el Superior Tribunal de Justicia recibió fondos durante el mes de julio por 95 millones de pesos para su funcionamiento y el pago de los haberes. Envíos que fueron creciendo desde marzo, donde se habían girado cerca de $ 79 millones. Respecto al Ministerio Público Fiscal, el flujo de dinero se sostuvo estable en los últimos meses, entre los 28 y los 30 millones de pesos.

Uno de los puntos críticos  han sido los servicios públicos. Dentro del pago a los organismos, las erogaciones para la Dirección General de Servicios Públicos han sido cambiantes: 5 millones en marzo, casi 13 millones en abril, baja a los 10 millones durante mayo y escala hasta los casi 19 millones en junio. El último mes computado de julio se bajó nuevamente los 7,8 millones.

En marzo por obligaciones del Tesoro y Servicios de la deuda se pagaron $546 millones, en abril $601 millones, mayo $752 millones, para luego bajar a los $20 millones durante junio y tan solo $2,6 millones durante julio.

Los ingresos marcan que desde Anses entraron a las arcas provinciales $19 millones por el convenio firmado con Seros y las provincias que no han transferido su caja de jubilaciones a la provincia.

Para cumplir con el refinanciamiento de las Letras, a través del Fondo Fiduciario ingresaron 938 millones en marzo, 597 millones en abril, y 748 millones durante mayo. Por adelanto de coparticipación, el Gobierno Nacional giró a través del Banco Nación alrededor de $350 millones de manera periódica.

Dios pague

Quien busca cobrarse es el presidente de la F.E.Ch (Federación Empresaria de Chubut) Carlos Lorenzo, que se mostró muy preocupado por la deuda que la provincia de Chubut mantiene con los prestadores.

2.000 cuentas empresariales de la localidad de Esquel, ya han sido embargadas por la AFIP al no poder cobrar a la provincia.

Los representantes de la F.E.Ch se reunieron con el gobernador Mariano Arcioni. Lorenzo detalló que “a valores del dólar, la deuda era de 600 mil dólares y hoy es de 300 mil pesos nada más, pero recuerdo haber escuchado en algún momento que Luis Tarrío dijo que la misma podría llegar a estar en 4 mil aproximadamente”.

También, explicó que la deuda “está en todo el sistema, no importa el estado de avance, si no que haya un registro del expediente. Por ejemplo servicios públicos se ha manejado por teléfono”.

Desde la Federación Empresarial se solicita que haya un criterio único como lo hace el IPV con sus prestadores. Las más afectadas con la falta de pago, serían las pequeñas y medianas empresas que venden los insumos para los hospitales públicos o los proveedores de obra pública.

Lorenzo puntualizó que “sí o sí se deberá armar una grilla para ir teniendo en cuentas las herramientas que el estado nos ha brindado, las cuales son muy distintas en la reglamentación. La deuda que está en sistema no hay que censarla, la que esta como tramitándose o la que ya tiene orden de pago en la administración sí y no se trata de una cuestión de bonos porque el banco de la provincia no la va a tomar”.

Para el presidente de la F.E.Ch no tiene sentido que a los proveedores les garanticen un crédito, cuando no están cobrando y no tienen la plata para pagarle al banco, por esto opina que “de alguna manera hay que resolver esto, pero ésta no sería una buena opción”.

Fuente: Diario El Chubut / Argentar Noticias / Diario Jornada / El Diario de Madryn