El empleo dejó de caer en agosto y marcó una mejora del 0,1%
El empleo asalariado registrado en Argentina dejó de caer en agosto, mostrando una ligera mejora del 0,1% respecto al mes anterior, y un 0,2% en septiembre. Sin embargo, el salario real de los trabajadores registrados experimentó una caída del 2,6% en términos reales.
Según datos de la Secretaría de Trabajo, el empleo de calidad se mantuvo estable después de 11 meses consecutivos de caídas.
Luis Campos, investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, comentó que «en agosto el empleo registrado en el sector privado dejó de caer y el salario dejó de crecer».
Aunque hubo un incremento mínimo del 0,06%, el sector público continuó en declive, lo que resultó en un crecimiento neto muy limitado. A pesar de la estabilización del empleo, la situación se complica por la caída del salario real.
En agosto, los salarios nominales aumentaron un 1,5%, pero este incremento fue insuficiente para superar una inflación del 4,2%. Como resultado, el poder adquisitivo se vio afectado; en septiembre se estima que los salarios habrían caído un 2,8% en comparación con noviembre de 2023.
Entre noviembre y agosto, se perdieron 195.570 puestos de trabajo: 138.785 en el sector privado, 43.781 en el público y 13.004 en casas particulares. En contraste, se sumaron 89.439 nuevos monotributistas. Aunque hay una mejora en el empleo formal privado, esta se ve opacada por la caída del salario real.
Campos también destacó que tanto la industria como la construcción dejaron de ser responsables de la pérdida de empleos. La construcción mostró una leve mejora, mientras que la industria mantuvo su nivel de empleo estable. El comercio fue otro sector que contribuyó al crecimiento del empleo.
Por su parte, Hernán Letcher, director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), señaló que desde la asunción de Javier Milei solo algunos sectores como agroindustria y minería han creado empleo. En cambio, la construcción y la industria han perdido decenas de miles de puestos.
En términos regionales, trece provincias experimentaron pérdidas de empleo mientras que once lograron incrementos. Buenos Aires y CABA fueron las más afectadas con pérdidas significativas, mientras que Neuquén reportó un aumento en el empleo.
La situación laboral presenta un panorama mixto: aunque el empleo registrado muestra signos de estabilización, los salarios continúan deteriorándose frente a una inflación persistente.
