Noboa extendió el estado de excepción en seis provincias de Ecuador
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, renovó el «estado de excepción» por 30 días debido a la «grave conmoción interna» que afecta a seis provincias y un municipio, como resultado de la violencia criminal atribuida a grupos organizados.
A través de un decreto, Noboa extendió la medida en las provincias de Los Ríos, Guayas, Santa Elena, Manabí, El Oro y Orellana, así como en el municipio de Camilo Ponce Enríquez, en Azuay.
La Presidencia indicó que esta decisión permitirá reforzar las estrategias de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas para garantizar la seguridad ciudadana, el orden público y la protección interna.
Esta medida implica la suspensión de algunos derechos fundamentales, como la inviolabilidad del domicilio, la inviolabilidad de la correspondencia y el derecho a la libertad de reunión, siempre que se garantice el derecho a la protesta pacífica, conforme a lo dictaminado por la Corte Constitucional.
El mandatario decidió mantener el toque de queda de 22:00 a 05:00 horas en 19 municipios y una parroquia.
Desde el 9 de enero, Ecuador se encuentra en un «conflicto armado interno» declarado por Noboa contra 22 bandas del crimen organizado, a las que ha calificado como «terroristas». Como parte de esta medida, se han desplegado militares en las calles y zonas conflictivas para neutralizar las actividades de estos grupos vinculados al narcotráfico.
A pesar de las medidas, la ola de violencia en Ecuador no cesa. Tan solo días después del anuncio del estado de excepción, dos trabajadoras de una cárcel fueron asesinadas
Ecuador se volvió el primer país de Latinoamérica en homicidios per capita, con una tasa de 47,2 por cada 100.000 habitantes en 2023, ocho veces mayor respecto a 2016, producto del auge de la violencia de los grupos criminales, principalmente dedicados al narcotráfico, aunque también están incursionando en la minería ilegal.
De acuerdo al Gobierno, las muertes violentas a nivel nacional han descendido un 17 % en 202b4 respecto al año anterior, pero los episodios de violencia criminal no han cesado, a la vez que también se siguen reportando secuestros y extorsiones.