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Presupuesto se busca

El Gobierno buscará hoy cerrar la negociación por el Presupuesto 2019 en la Cámara de Diputados con un único interlocutor: el bloque Justicialista, que responde a los gobernadores peronistas. Confiado en lograr que la mayoría de los integrantes de esa bancada apoye el proyecto y las iniciativas complementarias para subir o mantener impuestos, buscará luego, el miércoles, darle media sanción al texto.

Desde el comienzo de la crisis, el Gobierno se fijó un cronograma legislativo con el que busca dar señales políticas de fortaleza hacia los mercados y el Fondo Monetario Internacional. Por eso, quiere que el Presupuesto 2019 sea convertido en ley antes de la reunión del G20 a fines de noviembre en Buenos Aires. Ese límite lo obliga a intentar resolver la media sanción de Diputados este miércoles o a más tardar el 31, para darle al Senado un tiempo prudente para discutir el tema y llevarlo al recinto.

Junto al Presupuesto, Cambiemos quiere debatir otros cuatro proyectos que ya fueron dictaminados. El cambio en las alícuotas de Bienes Personales, la modificación en los criterios para (impedir) que las empresas puedan ajustar balances por inflación, la adenda al Pacto Fiscal, y el monotributo social tabacalero y cañero para que los trabajadores de esas actividades puedan cancelar sus obligaciones con la AFIP al momento de entregar el producto, entre otras disposiciones que reflejan las particularidades del sector.

La mayoría de esas iniciativas son rechazadas por gran parte de la oposición. Tanto el kirchnerismo como el massismo se niegan a votar el Presupuesto, los cambios en Bienes Personales y la adenda al Pacto Fiscal. Las tres iniciativas son de alguna manera inseparables, pues la segunda garantiza la posibilidad de hacer frente a algunas cuestiones que contemplan la primera y la tercera.

Incluso, diputados del bloque Justicialista las han cuestionado, como Diego Bossio. El bonaerense, que integra el bloque de los gobernadores pero no responde a ninguno de ellos en particular, mostró sintonía con otro referente del espacio: el jefe del bloque Justicialista del Senado, Miguel Pichetto, quien el viernes último cruzó en Mar del Plata al presidente de la comisión de Presupuesto en Diputados, Luciano Laspina, por los cambios impositivos.

«Le decimos a la gente que blanquee y después le queremos cobrar Bienes Personales», se quejó el senador. Laspina le respondió que el Gobierno no afronta la decisión «con alegría o satisfacción», pero defendió la modificación impositiva porque «la Argentina está atravesando una situación de emergencia que requiere ir al equilibrio fiscal».

No fue el único cruce que dejó el fin de semana. En las últimas horas, mientras la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, se mostraba en Salta con su par local Juan Manuel Urtubey, era Bossio quien le reclamaba a la mandataria que se ponga firme ante el gobierno nacional para exigir la actualización por inflación del Fondo del Conurbano. «No nos podemos hacer los distraídos y mucho menos anteponer intereses egoístas. Le pedimos a la gobernadora que avance con el reclamo sin miedo a las presiones internas. Nosotros la vamos a acompañar», prometió.

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