¿Qué va a pasar el martes 15 en Fontana 50?
Hay dos o tres cosas que no van a pasar.
El gobernador Mariano Arcioni no va a estar presente, lo que le baja el precio en términos políticos a la reunión.
Sí estarán Máximo Pérez Catán, pero eso tal vez solo irritare a los sindicalistas. Saben que no será ungido como sucesor de Mammaerilli -en términos de poder, con el nombre que se le quiera poner al cargo- para tomar las decisiones que solucionen el conflicto y estará haciendo «presencia» en la reunión.
Por suerte sí estarán los ministros de Gobierno -Marcial Paz-, de Salud -Adrián Pizzi- y de Educación -Graciela Cigudosa-, todos de buena imagen y trato con los sindicatos. Cigudosa viene de «poner la cara» en Comodoro y Esquel por la toma de escuelas por parte de los padres. El ministro Pizzi hasta se metió en la carpa sindical frente al Hospital Regional de Comodoro a dialogar con los trabajadores, recibiendo variados elogios.
También sabemos que no se va a poner arriba de la mesa la discusión paritaria. El ministro de Economía Alejandro Garzonio estará presente justamente para explicar «con los números en la mano» porque es imposible un aumento de salarios en el estado.
La via de salida del laberinto tal vez sea la «ruta salud» que diseñó el ex ministro «Tury» Hernández -incluso antes del fallecimiento del ex gobernador Mario Das Neves- y que supo incluir 500 trabajadores acordados uno por uno con los referentes sindicales.
Esto significaría un masivo pase a planta área por área. Es lo que anunció el actual ministro Pizzi en Comodoro la semana pasada: 200 pases a planta en Salud.
Es inexacto lo que publicó El Chubut diciendo que será blanquear trabajadores con prestaciones sociales pero una reducción de sus sueldos. En el caso de Salud al menos, es un empate con ganancia, porque es apenas cambiar la forma de contratación de anualizada -lo que permite reponer recursos en los hospitales con urgencia- a permanente.
Parece no quedar otro camino que el de desprecarizar las condiciones laborales de los trabajadores, algo que permite a los sindicalistas mostrar una conquista y al estado no le cuesta un peso más…ni un peso menos.
La Mesa de Unidad Sindical viene de una «victoria», como fue la presencia de Nora Cortiñas que les dio el envión suficiente para ingresar a Fontana 50 y «lograr» que no se descuenten los días de paro. Un empate técnico, que simbólicamente fue una derrota en el posicionamiento histórico del dasnevismo en la materia.
El gobernador Arcioni estará gestionando fondos nacionales en la capital y con suerte podría volver solo con dinero para aguinaldos
La política precisa de diálogo, pero sobretodo de iniciativa e imaginación para encontrar soluciones. Más cuando no hay plata, que al menos haya amor…
