SANTA FE: PULLARO GANÓ CÓMODO LA ELECCIÓN Y LA LIBERTAD AVANZA FUE 3°
El gobernador radical de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, ganó por casi 19 puntos a sus rivales en las elecciones para convencionales constituyentes. Ahora podrá impulsar una reforma de la Constitución provincial, con reelección incluida.
El gobernador logró 34,61 por ciento de los votos. El candidato del peronismo, Juan Monteverde, se ubicaba en el segundo lugar, con el 15,15% de los sufragios y el libertario Nicolás Mayoraz llegaba al 14,11 por ciento de los votos.
Pullaro tendrá entre 32 y 33 convencionales. Apenas tres menos que la mayoría necesaria para impulsar las 43 modificaciones que propone a la Carta Magna provincial.
«Vamos a terminar con los fueros parlamentarios. No va a haber más reelecciones indefinidas. Hemos ganado la elección de punta a punta. No hay pueblo dónde el frente haya sido derrotado».
El candidato libertario Mayoraz alcanzaba el tercer lugar, lejos de las expectativas del presidente Javier Milei; mientras que la postulante pro-vida Amalia Granata hizo una importante elección con el 12,35 por ciento de las voluntades y se ubicaba en el cuarto lugar.
La Libertad Avanza ganó el convencional por el departamento Rosario y tendrá 9 convencionales propios, unos dos menos que el partido de Monteverde, que totaliza 11.
Por su parte Marcelo Lewandowski (Activemos), el otro candidato peronista, lograba el 8,44 por ciento. La boxeadora Alejandra Oliveras se transformaba en otra de las sorpresas, con 5,61 por ciento de los votos y la chance de ingresar como convencional constituyente.
La participación apenas superó el 55 por ciento del electorado.
El objetivo del gobierno provincial (la elección incluye también las primarias a concejales e intendentes en algunos distritos) fue siempre el mismo: obtener los ansiados 36 convencionales que le permitirán a Pullaro manejar la Convención Constituyente, que entre otros cambios permite la reelección del gobernador, una prohibición que, hasta hoy, sólo tienen Mendoza y Santa Fe.
Tendrá que persuadir a convencionales de otras fuerzas políticas para que la reforma, con reelección incluida, pueda convertirse en realidad.
Con información de La Nación.