Coronavirus: la política chubutense abrió la billetera ¿quién da más?
Por Santiago Costa
En estos tiempos excepcionales de pandemia global, cuarentena nacional y Emergencia Sanitaria provincial, se vio otro suceso extraordinario: a la dirigencia política chubutense donando generosamente parte de sus sueldos públicos al sistema sanitario.
Ciudades que sí, ciudades que no
El intendente de Comodoro Rivadavia decidió donar el 50% de su sueldo (y el de sus doce Secretarios y veinte Subsecretarios). En Rawson el intendente Damián Biss decidió donar el 30% de su sueldo; en Trelew, Adrián Maderna y su planta política donarán el 25%.
Los sueldos de los intendentes y de los concejales son proporcionales según el tamaño de sus ciudades. El intendente de Trelew gana en mano el 64% (185 mil pesos) de lo que gana su par de Comodoro Rivadavia (288 mil pesos); el de Madryn el 62% (180 mil); el de Esquel el 45% (130 mil); y el de Rawson 35% (100 mil pesos).

A nivel concejales es más desparejo: los de Trelew ganan en mano el 59% (130 mil pesos) de sus pares de Comodoro Rivadavia (220 mil pesos); los de Puerto Madryn el 45% (100 mil pesos), los de Rawson un 32% (70 mil pesos) los de Esquel un 27% (60 mil pesos). Hay ciudades en que debe agregarse la antigüedad de cada concejal como trabajador en el estado, que suele ser mucha.
También hay ciudades en que el sueldo de los concejales es proporcional al sueldo del intendente (ente 60 y 80% según el caso). En otras el sueldo del Intendente es un múltiplo del sueldo de una categoría municipal.
¿Es lo mismo donar la mitad de 288 mil pesos, que un tercio de 100 mil pesos? ¿De qué vive un funcionario público, que no es rico, si dona su sueldo?
Sergio Ongarato decidió en principio que en Esquel las donaciones sean voluntarias y no compulsivas. Para eso debió vetar una ordenanza del Concejo Deliberante que congeló el aumento dado en diciembre y redireccionaba ese dinero hacia el sistema sanitario. El intendente, presionado por su gabinete, descongeló el aumento salarial e hizo individual el criterio de donar o no.
Luego se arrepintió y decidió donar el 15% de su sueldo, el 10% del sueldo de los secretarios de su gabinete y el 5% de sueldo de los directores.
En Puerto Madryn la decisión de no donar públicamente una fracción del sueldo al sistema sanitario fue política y se sostuvo en tres razones. La primera es desde el municipio ven las donaciones públicas como actos de demagogia política, «para la foto». Segundo porque en Puerto Madryn, distinto a Esquel o Trelew, no hubo aumentos de sueldos a concejales y planta política en diciembre.
Pero la razón principal es que el sastrismo utiliza desde siempre una histórica herramienta de la militancia política. El intendente, el vice, toda la planta política y los concejales oficialistas aportan el «diezmo» (que en alguno casos llega al 15% del sueldo) a su agrupación, que lo utiliza para entregar alimentos y medicamentos en los barrios populares.
En el caso de Trelew la decisión fue partidaria, ya que quedaron fuera los concejales de la oposición y se contaron como propias las donaciones de los legisladores provinciales, cuando la decisión la tomó el cuerpo legislativo.
Tres poderes para dos
Los legisladores provinciales ganan, con el impacto del último aumento, casi 350 mil pesos (están atados a la paritaria de los trabajadores legislativos, en un circulo vicioso). Cada legislador, donando el 25% de su dieta, aportará $87.500 pesos a la emergencia.

La jerarquía del poder judicial (los jueces del Superior Tribunal, el Procurador y el Defensor General) cobran, tomando una antigüedad promedio de 35 años, por encima de los 550.000 pesos en mano. Hay casos en que ganan hasta cien o doscientos mil pesos más, debido a una «excepcionalidad» del poder judicial provincial.
Su escalafón reconoce como «antigüedad» desde el momento mismo en que obtienen el título. Además, los funcionarios judiciales no pagan ganancias.
Ganando al menos un 55% más que el Gobernador (que gana 307 mil pesos, sin contar los adicionales, y asegura que desde el aumento de septiembre último dona su sueldo), un 37% más que los legisladores y más del doble que un ministro (que gana 230 mil pesos, sin contar adicionales), resulta insólito que un juez del Superior Tribunal como Alejandro Panizzi se excuse de colaborar en la Emergencia Sanitaria.

Amparándose en el pago escalonado de los sueldos públicos, el juez argumenta que «nadie puede donar lo que no tiene» y que su paciencia en el cobro es una «tolerancia solidaria». Aunque los sueldos de los Legisladores y de la jerarquía judicial son del cuarto rango, al Juez del Superior Tribunal Panizzi «no le parece razonable un pedido de semejante característica».
Los representantes nacionales
La Senadora Nancy González, donando el 100% de su sueldo de 280 mil pesos al Hospital de Puerto Madryn, dejó fuera de línea a los senadores Alfredo Luenzo y Juan Mario País.
Desde el entorno de País argumentaron que no importa si el senador es millonario, los legisladores deben estar bien remunerados y que ese debate en el marco de los cacerolazos le hace el juego a la antipolítica. También que donar la dieta, al menos públicamente, es un acto de demagogia.
La senadora menos adinerada prescindió de su sueldo y el senador rico no donó la dieta de la que no vive.
En el caso de los diputados, las autoridades de la Cámara Baja y los presidentes de bloque (Sergio Massa, Máximo Kirchner y Mario Negri) acordaron que los 100 mil pesos que cada diputado tiene asignado para colaborar con entidades de la sociedad civil de sus provincias, se centralizaran para entregar el Instituto Malbrán (Juntos por el Cambio) y al Hospital Garrahan (Frente de Todos).

Pero las negociaciones de algunos diputados del Frente de Todos lograron direccionar sus fondos a sus provincias. Santiago Igón, Rosa Muñoz y Estela Hernández acordaron con el ministro de Salud de Chubut destinar 300 mil pesos a la compra de reactivos, la mitad para el Hospital de Trelew y la otra mitad para el de Hospital de Esquel. No donaron de sus sueldos de diputados (169 mil pesos), pero ¿Qué es más importante la donación de un porcentaje del sueldo o una gestión política por fondos públicos, como en el caso de los 300 millones de pesos en Aportes del Tesoro Nacional que recibirá Chubut?
Pretender representantes «ad honorem» de la soberanía popular llevaría a que solo los ricos puedan postularse a los cargos públicos para defender el bien común. Senadores ricos que no donan su sueldo y de clase media que lo donan entero. Intendentes que ganan tan bien que pueden donar el 50% e intendentes que no ganan tan bien y donan el 30%, porque no viven de su sueldo. Diputados y ciudades que prefieren dar respuestas con gestión de fondos federales. Legisladores que ganan fortuna y donan fortuna. Miembros del Poder Judicial que ganan más que nadie y no donan nada (al menos públicamente). Todo suma y espabila.