Los escenarios que abre el efecto Massa
Por Martín Gómez
La fórmula oficialista Segio Massa- Agustín Rossi movió las fichas al interior de Unión por la Patria. Pero también resonó en Juntos por el Cambio. El cambio de nombres ¿Modifica en algo la campaña? Tal vez sí y estos son los posibles escenarios que se desprenden.
Si consideramos a Sergio Massa como un “moderado”, su candidatura favorece a Horacio Rodriguez Larreta en la interna de Juntos por el Cambio, que es más “moderado” de esa interna.
Si Larreta le gana la pulseada a Patricia Bullrich, tendremos enfrentados ambos espacios con candidatos moderados y Larreta ganaría el espectro del centro.
Al correrse la elección hacia el centro “pragmático”, se reduce el potencial voto a los extremos ideologizados, siendo el más extremo el espacio libertario de Javier Milei. En este escenario, los tercios se tranforman en un binomio con una fuerte gravitación al centro moderado.
Si Patricia Bullrich gana la interna de Juntos por el Cambio, Sergio Massa podría verse favorecido. Bullrich posee un discurso más extremista y bélico y competiría por los mismos votantes con Javier Milei.
En este escenario de tres espacios fuertes, dónde dos disputan el mismo extremo, el espacio del centro encabezado por Sergio Massa, que tiene una intención de votos no mayor al 27%, podía ser el candidato más votado de todos en las PASO y marcar una tendencia para las elecciones generales.
Otro escenario podría ser similar al del año 2015, con tres espacios políticos muy fuertes compitiendo palmo a palmo. Ese año hubo una diferencia de 10 puntos entre el primero y el segundo; y de 10 entre el segundo y el tercero.
Si bien la diferencia era ajustada, había una cierta inclinación hacia el Frente para la Victoria. Hoy la tendencia de las últimas encuestas marcan un final aún más ajustado, un virtual triple empate técnico.
Un último escenario es que, con tres espacios muy competitivos, las recientes crisis provinciales de figuras relevantes de UxP y Jxc favorezca al frente libertarios.
La represión en Jujuy a manos de Gerardo Morales o la desaparición de Cecilia Strzyzowski a manos del clan Sena, una familia allegada al actual Gobernador (que recuerda en caso María Soledad en Catamarca o el el doble crimen de la dársena que provocó la intervención federal en Santiago del Estero), remite más que nunca a “la casta”. La antipolítica le permite a Milei crecer en el electorado, principalmente captando el voto joven.
En los últimos sondeos electorales Milei se sostiene pero hace meses sus candidatos viene sufriendo derrotas en las elecciones provinciales, lo que lo dejó como el gran perdedor y reveló la falta de estructura partidaria necesaria para una elección nacional (algo que el PRO en 2015 resolvió aliándose con la UCR).
Hay un camino incierto hacia las próximas elecciones y una sociedad cansada de la tradición política argentina, que no logra resolver la dura crisis económica ni contener la inflación.
La ciudadanía elegirá atenta al contexto y su bolsillo. Hoy los jóvenes militan causas concretas y no grandes ideologías. El discurso que vaticina un cambio de rumbo en la política no cuenta con la estructura política territorial y eso lo limita a una mera utopía.
Este 2023 la ciudadanía deberá elegir en el cuarto oscuro entre malos conocidos o “buenos” por conocer.
