¿Se viene Maderna?
Cauteloso y prudente es el perfil de Adrián Maderna en temporada baja, pero suele pisar el acelerador de cara a los años electorales.
Es notorio y evidente como su fuerza política «Chubut Primero» comenzó a abrir unidades básicas en Trelew y allende el valle, rompiendo con el mito de que «la campaña empieza después del mundial».
Adrián Maderna declaró fuerte y picante con frases como “somos imbatibles, Trelew es nuestro y seguirá siendo peronista”. Aunque «la mano que muestra el mago» diga que se caminan los barrios para no perder contacto con la gente y blindar Trelew de cara a retener el municipio en 2019; la «otra mano» -la que hace el truco- tiene un perfil provincial.
Aquella unidad básica abierta en Camarones, la charla con vecinalistas de Esquel en Trelew y las fuertísimas declaraciones de Lorena Alcalá -reina en el ajedrez del madernismo- que arrojó el guante diciendo que «el partido justicialista le cerró las puertas a Maderna» así lo atestiguan.
Aquel guante lo recogió ni más ni menos que Javier Touriñan cuando dijo que «el peronismo tiene que retener a Adrián Maderna y a Ricardo Sastre».
Justamente lo que oculta el mago es que el que está afuera del PJ no es tanto Maderna como Mac Karthy y sus tres gravitantes legisladores, que a esta altura ya son más de Trelew como bloque peronista que del mackarthysmo, dada la potente alianza que sus jefes sostienen.
Al abrir la unidad básica en Camarones – la primera de las 3 mil que tiene proyectada Chubut Primero en la provincia-, Adrián Maderna dijo que «acompaño la idea de generar espacios de debate y búsqueda de consensos. Esto debe darse en toda la provincia». Gustavo Mac Karthy estaba a su lado.
Así las cosas Chubut Primero mostró que las calles de Trelew son del peronismo -incluso la que lleva a la intendencia-, y que este nuevo armado provincial puede ser el vehículo construido para la ocasión (como lo fue Chubut Somos Todos para Mario Das Neves) que compita con el PJ si es que éste osa dejarlos afuera o faltarles el respeto con el ofrecimiento de cargos menores.
El acto fue una demostración de emancipación política definitiva de los escombros del dasnevismo, incluida fontana 50.
¿Fue también un mensaje para Carlos Linares y Ricardo Sastre?
