Morir en la U6
Apenas dos semanas después de que un hombre matara a otro a “facazos” en medio de una pelea, siguen los «enfrentamientos» en la U6 de Rawson y hay un hombre grave. Aquella vez sucedió en el pabellón 7, en esta oportunidad en el 10. En ambas hubo un deplorable silencio institucional de la cárcel de Rawson.
Ahora dos reclusos debieron ser sacados del establecimiento y trasladados a distintos centros asistenciales de la zona. Uno de ellos llegó al hospital de Trelew en grave estado y fue operado. El otro recluso fue alojado en el hospital Santa Teresita de Rawson.
Ambos presentan heridas de arma blanca y se sospecha que no habría sido la única pelea de la semana; se habla de otra en la que también se registraron víctimas que ocurrió en el pabellón 7.
El mutismo que han adoptado las autoridades del penal es notable. Desde allí, según lo dicho por el propio director, no sale ninguna información oficial: “todo se maneja desde Buenos Aires”.
El hecho ocurrió en el pabellón 10, en el que se encuentra Alan Schlenker, exjefe de la barra brava de River Plate. Todos lo llaman “La Villa” y Schlenker lo describió como un lugar donde “están todos los presos de mala conducta en condiciones deplorables. Esto es denigrante e inhumano, un régimen militarizado con cero reinserción y en el que se soportan temperaturas de siete grados bajo cero sin calefacción y con ventanas rotas cubiertas con plásticos para sobrevivir”.
El responsable de preservar la vida de los ciudadanos detenidos es el director del Instituto de Seguridad y Resocialización, Prefecto Marcelo Fera Racinello
Hace semanas el asesinado fue Alejandro Catrini, descrito como «de Buenos Aires, entre 30 y 40 años», condenado por delitos de robo y asalto. Catrini llegó agonizando al hospital Santa Teresita la noche del domingo, minutos antes de las 23 y falleció instantes después, producto de múltiples heridas punzantes en la zona torácica y en otras partes del cuerpo.
La pena está garantizada en la U6, la vida no.
